H. NAVEGACIÓN -SERIE I- DRAKKAR ESCANDINAVOID92880053


Esta colección consta de veinte monedas. Cuatro de ellas se ponen en circulación en 2018 y las 16 restantes en 2019.
Para coleccionarlas puede adquirir el libro-estuche "Historia de la Navegación", donde se describen las características técnicas de cada uno de los barcos.
Como oferta de lanzamiento le ofrecemos la posibilidad de adquirir un pack con las cuatro primeras monedas de la colección junto con el libro-estuche de regalo.
En el anverso se reproduce en colores un detalle de la obra titulada “Embarcación de los vikingos escandinavos. Siglo X. Reconstruida por el Gobierno Noruego con ocasión del Cuarto Centenario del Descubrimiento de América”, realizada por Rafael Monleón y Torres, que se conserva en el Museo Naval de Madrid. A la derecha, la marca de Ceca. Por encima de la imagen central, en sentido circular ascendente y en mayúsculas, la leyenda DRAKKAR ESCANDINAVO.
En el reverso (común a todas las piezas), aparece el valor de la moneda 1,5 EURO y la leyenda HISTORIA DE LA NAVEGACIÓN. Fuera del círculo central aparecen seis delfines saltando, en sentido contrario a las agujas del reloj, sobre los mismos motivos acuáticos que figuran en los anversos.
Serie | Historia de la Navegación |
Año Emisión | 2018 |
Color | Sí |
Diámetro (mm) | 33 |
Valor Facial (Euro) | 1.5 |
Metal | Cuproníquel |
Peso (g) | 15 |
Tirada (unds.) | 10.000 |
DRAKKAR ESCANDINAVO
Época: Del siglo VI al XI
Eslora: desde 35 m o más hasta otros más cortos
Propulsión: Vela y remo
Descripción: Los pueblos nórdicos o escandinavos (daneses, suecos y noruegos), denominados genéricamente como vikingos, desde el siglo VI al XI presionados por la pobreza de su tierra y la expansión demográfica, se lanzaron al mar en viajes de saqueo y comercio, actividades que fueron en aumento al resultar muy productivas y beneficiosas.
El medio utilizado en sus desplazamientos, desde el siglo VII al XI, era el navío conocido con el nombre de drakkar, evolución de una palabra islandesa con la que se nombraba a los dragones y que recibió ese nombre porque en la proa, como una especie de mascarón, llevaban una figura de ese mítico animal o de una serpiente, snekars. Barcos largos y estrechos, sus medidas variaban bastante de unos modelos a otros.
De borda baja, sin cubierta y con bancos en hilera para los remeros (hasta 90 para manejar 40 remos), pues inicialmente esta era su fuerza motriz, se construían con maderas superpuestas (sistema de casco trincado) tapando las juntas con musgo, lana u otros elementos embreados para convertirlos en estancos; su poco calado (80 cm.) le permitía moverse en aguas de escasa profundidad, pudiendo remontar los ríos y por su poco peso (unos 400 kilos) podían ser trasladados por tierra si era necesario. Los escudos que utilizaban en los combates, solían ponerlos hacia fuera a lo largo de las amuras. Como consecuencia de la observación y la experiencia, los constructores incorporaron la quilla, una pieza a manera de orza y un timón, a estribor; además, aplicaron un mástil (de unos 18 metros de altura) con vela cuadrada de lana o lino, pintada de diversos colores y reforzada con cuero, que facilitaba los desplazamientos, pudiendo alcanzar, en ocasiones, hasta los 14 nudos.
Había tres tipos de drakkars: los de guerra y largas travesías (snekke); los de prestigio o ceremoniales (langskip), utilizados en muchos casos para enterrar a los jefes con sus pertenencias, incendiándolos en el mar; y los empleados en la exploración, comercio y defensa de las costas (Knarr), que eran más pesados y de eslora más corta.
Hitos: Drakkares famosos fueron el Ormen Lange (la Gran Serpiente) de Olaf I de Noruega (995-1000) y el Mora, buque insignia de Guillermo el Conquistador (rey inglés de 1066 a 1087) en la conquista de Inglaterra. Muy famoso fue el de Erik el Rojo y Canuto II El Grande, rey danés (1018-1035) que llegó a tener 1.400 naves de este tipo con capacidad para movilizar a 126.000 hombres.